Hilvanes III: Hilvanes





Hilvanes


    Siempre he escuchado a mi madre eso de que “un caldo hace buen cuerpo” y “que las sopas guapean”.  Así, con su forma sencilla de hablar y toda la contundencia que aportan la razón y los años de experiencia.  No hay mal que no halle templanza ni pena que no se difumine con un caldito casero.  Ni mejor reconstituyente para después de un trasnoche.  Esto último lo digo yo, que mi madre de trasnochar poco.  Poco no, nada; que los tiempos de las mujeres antes llevaban otro ritmo y seguían otras costumbres.  Ahora entramos, salimos, volvemos a salir, opinamos, ascendemos progresivamente, volvemos a salir un rato, nos independizamos y gritamos a pleno pulmón que somos capaces y valientes, constantes, actas y aptas.  En una palabra MUJERES.  Guerreras, inteligentes, incansables.  Nosotras que tanto valemos…
  Y me vengo arriba enfervorecida con esta arenga que ya quisieran muchos.  Que estoy a un tris de pintarme una pancarta y salir a la calle, crear una ONG pro mujeres, hacerme revolucionaria, poner una pica en Flandes, subir el K2 o dar la vuelta al mundo.  Gritarte que “Nunca mais”, o “Yes, we can”, “Show must go on”…  Llegados a este punto de bilingüismo colosal y como una cosa lleva a la otra, aparece ante mí Ana Botella con su esperpéntico “Relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor”.  La risa torna en carcajadas, el ímpetu feminista en ganas de cachondeo, que una cosa no está reñida con la otra, y deduzco que Ana Botella y la lengua inglesa sí estarán reñidas de por vida.
Ella que todo lo tuvo, siempre hizo gala de una locuacidad desmedida en cuanto a incoherencias y frases poco acertadas.  Hay que tener papo para decir que “el matrimonio homosexual es como si se suman una manzana y una pera…¡nunca pueden dar dos manzanas!”.  Y se queda tan ancha, hasta pedagógicamente satisfecha con la metáfora establecida.
¿Qué pensará esta cristiana mujer de los batidos détox, tan a la orden en nuestros días, donde se mezclan frutas y verduras?  ¿Y del potaje de Cuaresma que aúna garbanzos con judías y los adereza con bacalao?  ¡Qué despropósito!
  “It’s very difficult todo esto”, que dijo Mariano Rajoy al Primer Ministro Inglés.  Otro que de inglés cero patatero, pero cuando menos tiene claro que “España está llena de españoles”, “que un vaso es un vaso y un plato es un plato” o que “a veces la decisión es no tomar ninguna decisión, que también es tomar una decisión”.  Ay, madre mía… ¿Y os parece difícil la física cuántica?  ¡Viva Honduras! y vamos a cambiar de tema.
  Estas cabezas pensantes son las que tienen nuestro futuro en sus manos y con semejante nivel de reflexiones no es de extrañar el desatino con el que nos gobiernan.  Que no lo digo yo, esto viene de lejos.  Allá por 1982 Alfonso Guerra declaraba: “vamos a dejar España que no la va a reconocer ni la madre que la parió”.  Una consulta de tarot y videncia le ponía yo a este hombre.  Ni Nostradamus lo hubiera hecho mejor.  Véase: Banca Catalana, Emperador, Filesa, Caso Guerra, Feval, Pujol, Bankia, CAM, Bárcenas, ERES, Fabra, Gürtel, Malaya, Mercasevilla, Nóos, Rumasa y Nueva Rumasa, Palau, Púnica, Taula, Tamayazo, Lezo.  Son solo algunos de los casos de corrupción que nos regalan.  El listado es infinito y las consecuencias redundan siempre en un maltratado estado de bienestar que ve con el paso de los años cómo se desvían millones a cuentas suizas y otros paraísos fiscales, ganando terreno la privatización de servicios y los recortes.  Menos mal que María Dolores de Cospedal fue sincera y directa: “hemos trabajado mucho para saquear nuestro país”.  Ja ja ja ja ja.  ¡Qué tía, con una par!  Mientras tanto, otros tiran balones fuera con menudencias de este tipo:
-       Arias Cañete: “yo veo un yogur y ya puede poner la fecha que quiera, que me lo como”.  Claro, el yogur, un chuletón de kilo largo, cuarto y mitad de gambitas de Huelva y dos botellas de Pago de Carraovejas.  Tonterías las justas…
-       Luís de Guindos: “nunca he visto en mi vida un billete de 500 euros”.  Ja ja ja ja ja ja ja ja.   ¡¡Que me descoyunto!!  Cari, se te ha ido de las manos, que eres ministro de Economía y  Competitividad, no ama de casa y sus labores.
-       Cristóbal Montoro: “los sueldos no están bajando, sino que se está moderando su crecimiento”.  Claro que sí, guapi, y tú no eres feo, solo de belleza distraída.  Qué coraje…
-       Esperanza Aguirre: “los agentes no tenían nada mejor que hacer que perseguir a una sexagenaria” o “no es que haga números a final de mes, es que a veces no llego”.  Lideresa de mi vida, eres pobre como yo, por eso me parto y me mondo y con mucho disimulo te hago un corte de manga y te mando a tomar por … 
   Estoy pasando de la euforia del bilingüismo a la indignación mas rastrera, del jubiloso feminismo a la mala leche contenida.  Por eso, retomando el hilván que daba pie a este alegato volvamos al caldo y sus propiedades de guapear.  Y “haciéndome la rubia”, que como dice Cifuentes se consigue mucho más con los hombres, voy al lío.  Jesús Berrocoso, me temo que no podré pasar ninguna noche por la peña El 27 a disfrutar de un reconstituyente vaso de caldo.  Si eso, te hago llegar un “taper” con capacidad de litro y medio y ya me encargo yo de darle buen fin. 

E. Molano Gil

(Artículo de opinión publicado en la revista cultural de El 27, junio de 2017).

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